Una de las experiencias más enriquecedoras y auténticas que he tenido, tanto a nivel personal como profesional, la viví en Perú en el año 2013. Aunque ya había visitado el país en 2011 buscando nuevos mercados cuando era Director Financiero en un grupo de promoción inmobiliaria, en 2013 volví varias veces por mi colaboración con la OIDE (Organización Internacional de Emprendedores).
Hasta ese momento no sabía que Perú es un país de emprendedores, pero no de la forma que he visto en España. Allí cualquier persona lanza un negocio, normalmente tradicional sin casi tecnología o innovación, muchas veces de manera informal (sin alta en Hacienda), y sobre todo sin ningún tipo de ayuda o subvención pública. En España, y lo digo por experiencia, parece que para emprender tenemos que formarnos mucho, conseguir financiación bancaria y ayudas públicas, meses redactando un plan de negocio infalible, etc. Y no digo que eso no sea importante, sino que en mi país no he visto tan a menudo el espíritu emprendedor que explica porque el Perú es un país de emprendedores y España no.
En colaboración con la OIDE pude conocer a muchos pequeños emprendedores que aunque tuvieran un pequeño negocio muy tradicional, por ejemplo un sencillo puesto de alimentación en un mercado local, querían formarse para hacer crecer su negocio. Tenían una visión y sabían que para alcanzarla tenían que aprender marketing, finanzas, ventas, etc aunque supieran poco más que leer y escribir. Eso no quiere decir que no existan allí problemas similares a los que sufren las Pymes en España, tal y como comenté en el programa de radio «Haciendo empresa» y cuyo audio del programa radial publiqué en mi canal de YouTube.
Además de conferencias y entrevistas también colaboré con la OIDE (Organización Internacional de Emprendedores) con artículos para revistas, tratando temas como el marketing digital, en el que no había profundizado mucho al no estar tan desarrollados en la época de mis visitas. Aquí te dejo uno de los artículos que redacté y que está publicado en en mi perfil de SlideShare.
Pero en mi visita no solo tuve tiempo para conferencias, entrevistas, y otras actividades con emprendedores peruanos. También pude dedicar tiempo a disfrutar, dentro de la enorme diversidad cultural y natural que ofrece Perú, de la increíble gastronomía peruana así como a viajar a los lugares más conocidos del imperio Inca: Cuzco y el Machu Picchu. Sentir los efectos de la altura, atravesar vías casi vírgenes hoy en día, y poder ser testigo de cientos de años de historia, fueron algunos de los recuerdos que guardo de la parte más turística de mis visitas a uno de los Estados Andinos.